Crónicas de Santa Clara (6): “Enemigo mecanizado“

Como había sido anunciado en posteos anteriores aquí esta el último capítulo de "Las Crónicas de Santa Clara". Tal vez quieran más de estos personajes, pero para eso van a tener que esperar a que vuelvan a realizar un viaje o alguien los lleve a nuevas y lejanas tierras donde puedan tener nuevas aventuras.

Tal vez lo único que deba aclarar es la referencia a la frase de Mike de las Tortugas Pinj...digo Ninjas. El clásico "Kawabonga", que en este caso es "Canabonga", en honor al apellido de Tiamas.

Bueno espero que disfruten de está crónica y ya nos volveremos a encontrar en siguientes posteos.

Saludos cordiales por parte de Lord_Vampiro.

Crónicas de Santa Clara (6): “Enemigo Mecanizado“

La última mañana antes de partir, todo estaba demasiado tranquilo y silencioso. AL se despertó y se dirigía a despertar a los demás cuando de repente encontró un misterioso mapa con una nota de rescate. Comenzó a soplar su cuerno de llamada y entró en la habitación de sus amigos. Allí estaban: TIAM enrollado entre frazadas como una oruga y durmiendo plácidamente; Renegada recargando su arma y con muchas manchas de barro; y VAM, algo preocupado y al tanto de la situación antes de que su amigo hablara. AL les mostró la nota y el mapa. 

VAM explicó que él y Renegada pudieron matar a uno de los misteriosos seres de barro que entraron a secuestrarlos a todos y aún estaban a tiempo para buscar al resto. Renegada se subió arriba de TIAM y, a zarpazos limpios, despertó al joven. Rápidamente lo pusieron al tanto de lo sucedido.  TIAM les recordó que debían tener todo preparado para cuando llegue la dueña de la casa, pasado el mediodía. Renegada les ofreció ayuda para proteger la casa y ellos fueron en busca de sus amigos.   

TIAM, AL y VAM salieron de la casa preocupados, solo para notar que todas las calles estaban desérticas. Parecía como si todo hubiera sido preparado. Al cruzar por el nido de los Búhos, esas aves hicieron sonidos extraños. AL pudo comprenderlos y el joven entró en una alerta profunda, pudiendo ver a unos horribles seres de barro llevándose a tres de sus amigos. La ira de AL estalló y un trueno fue dirigido al que tenia de prisionero al inconsciente GAE, dejándolo en libertad. TIAM pudo sentir un llamado de la naturaleza y dejándose llevar por instintos animales corrió al segundo de los hombres de barro a gran velocidad, metiéndose por pastizales y acorralándolo cerca de árboles. Tras patearlo como una cabra pudo liberar a WA, que rápidamente recupero la consciencia. 

VAM perseguía al tercer hombre de barro y ese ser se detuvo cerca de un puesto de choripanes. Acorraló a su enemigo, envolviéndolo en un manto de sombras para confundirlo y poco a poco lo fue golpeando hasta dejarlo en pedazos para rescatar a TINK. La joven volvió en sí y pronto todos volvieron a reunirse en la casa.

Estaban preocupados por DI. Antes de ir en su búsqueda se apuraron y volvieron a sus vidas normales, esperando a que apareciera la persona que les alquilo la casa. Luego de terminar los preparativos decidieron que debían ir en la búsqueda de su último amigo perdido.

Rápidamente llegaron al centro de la ciudad donde todo seguía desértico, oyeron el ruido de una moto y Renegada volvió a aparecer, informándoles que un misterioso objeto mecánico estaba en la playa. 

GAE, TINK y WA se sentían muy agotados y se quedaron junto a la felina cuidando el equipaje. Mientras que AL, TIAM y VAM se dirigieron a la playa.

Allí encontraron más hombres de arcilla y pudieron ver el vehículo de los piratas en perfecto estado.

TIAM golpeo a sus enemigos con otra de sus técnicas especiales: "Rock The Goat". 

AL se abrió paso con un "Thunder Knee" y VAM simplemente se desvaneció en el aire haciendo que los hombres de arcilla se hagan pedazos entre ellos. 

Cuando los jóvenes estuvieron cerca del mar fueron capturados inesperadamente por los brazos metálicos de la nave pirata.

En el interior vieron a DI suspendido en el techo y atado de pies y manos. Tenía el torso descubierto y estaña amordazado mientras un robot lo azotaba haciendo que su dolor se convierta en energía para el barco. 

-"Inútiles humanos. Los tres a quienes no les pude quitar los poderes…Lo pagaran por haber destruido nuestros anteriores planes y nuestros cuerpos mecanizados." – Dijo una voz metálica que salía de la computadora y pudieron comprender la realidad de las cosas.

Era hora de luchar y TIAM se movió ágilmente pateando  al robot para distraerlo mientras que AL lanzaba un "Thunder Punch" en la cabeza de la maquina, dejándola K.O. 

VAM trató de liberar a su amigo, pero se dio cuenta de que el seguro de los grilletes era computarizado. AL intentó meterse en la computadora de la nave, sin lograr comprender los extraños códigos escritos en la pantalla.

Repentinamente su enemigo se regeneró, sacando dos látigos: uno simple  y otro de múltiples colas. TIAM, dándose cuenta del peligro, atacó con su “Rock The Goat”, pero el látigo múltiple era súper efectivo y recibió una ráfaga de azotes quedando en el piso paralizado.

AL seguía intentando liberar a DI por medio de la computadora  pero un azote del otro brazo robótico iba dirigido a su espalda.  

VAM  se adelanto a los hechos y protegió a su amigo cubriendo y tomando el arma con su brazo. Y entrando en un trance  tomó prestado un poco del poder de AL para generar una descarga eléctrica que puso en cortocircuito el sistema del humanoide mecánico. Se quedó con el látigo en la mano para golpear, iracundamente, el panel de control. 

-“Debemos destruir todo, por las buenas no va a pasar nada”- dijo VAM enojado por la situación.

AL asintió  y tras lanzar un “Trueno de suerte”. Concentró todo su poder en el tablero logrando por fin romper las ataduras que liberaron a DI.

VAM ayudó a DI y AL a TIAM. Juntos subieron a la cubierta del barco al oír que pronto habría una auto destrucción. VAM pudo ver a los Hombres Tiburón y lanzó a DI al agua dejándolo al cuidado de esos escualos amigables. 

AL tomó a TIAM y lo lanzó al mar para usarlo como tabla de surf, VAM también subió a la tabla humana y cuando el barco explotó, una gran ola los llevó hacia la costa. 

Los Hombres Tiburón llevaron a DI hacia la costa donde AL y VAM lo ayudaron a volver en sí.    

TIAM no se recuperó de la parálisis hasta qué un cangrejo le clavó una de sus pinzas en el pie. Y así, al fin pudieron reunirse con el resto de sus amigos mientras esperaban el vehículo que los llevaría nuevamente a sus tierras.

Las horas pasaron y la gente volvió a salir al pueblo. El Transporte que debía pasar a buscarlos llegó. El grupo subió al bus reflexionando que de esa manera terminaba la aventura.   

El micro arrancó y vieron a Renegada, saludándolos desde su moto. Estaban exhaustos por lo sucedido. Se quedaron dormidos en el micro, esperando volver a sus tierras, pero recordando por siempre los momentos que vivieron y siempre dispuestos a ir un poco más lejos por más aventuras.

                           

                               FIN de las Crónicas de Santa Clara.