viernes, 22 de julio de 2011

Veintidós Versos Arcanos

Recuerdo cuando tenía dieciseis años... Estaba en tercer año de secundaria. Aun seguía teniendo algo de fobia social, pero tenía amigos que calmaban esa situación. Por otro lado, mi obsesión religiosa se había visto quebrada por las filosofías que presentaba mi mente hace rato ya. Estaba decepcionado con aquel instituto secundario religioso lleno de hipocresías y malabares macabros. Pero ahí estaba él. Nuestro mejor profesor, el disfraz simbólico del mesías nihilista que yo llevaba adentro conmigo. Jorge Arieto... Espero haber escrito bien ese nombre. Él intento enseñarnos a muchos pendejos mediocres la belleza salvaje del surrealismo. Sus cadáveres exquisitos, sus frases azarosas tiradas al aire formando maravillas.

El tiempo siguió, aprendí sobre dadaísmo en un taller de literatura que lamentablemente duró poco. Conocí los entes alienígenos babeantes de H.P. Lovecraft. Disfrute de las prosas que se adjuntaban online en la red sobre Alfonsina Storni y Alejandra Pizarnik. Me enamoré y me desame. Odie y disfrute de la ira. Saborie los frutos de la melancolía y me di cuenta que estaba desnudo junto a Lilith ,pero no me avergoncé. Con orgullo, para salvarlo de si mismo, sacrifique a mi Abel. Baile sobre las filosofías del Dios-Astado Cernunnos. Viaje por el espacio y salude con una sonrisa mientras el caos nuclear en el centro del cosmos me devolvía, con su ira estúpida, la mirada.
Y sigo disfrutando de mi mismo y de los que me rodean. Ahora escribo en este pequeño espacio lo que se me cante el pepino. Pero sobre todo me doy cuenta del disfrute que se puede obtener de la escritura de pequeñas y simples creaciones textuales. Hace falta estar condenado al éxito para ser vanagloriado por el mainstream y sus pendejadas. Pero solo se necesita un poco de genio creativo para ser un djinn del underground. La voluntad, amigos míos, no existe. Sólo existe aquella zanahoria instintiva que hace a uno caminar para adelante y un par de factores aleatorios, apodados "suerte", para que te den un Premio Nobel de Literatura.
Sin más preámbulos, dejó mi Tarot Surreal a su completo disfrute. Una colección de sencillos versos que, quizás, sea repetido el concepto en algún futuro dentro de este blog.



Veintidós Versos Arcanos

I

Danzo, salto y muero

Tal cual puta babilónica.

Me entrego a Moloch
Y con su fuego negro
Recupero mi inocencia
Perdida.

II

Soy pagano, veo silfos y ninfas.
Soy cristiano, veo ángeles y vírgenes.
Soy ateo, veo ciencias y esperanzas.
Soy agnóstico, no tengo ganas de ver algo.
Soy nihilista, veo la magnitud de la nada
Y por alguna razón, soy el más realista.

III

Lloro mis lagrimas, las derramo en la vasija.
Sudo polvo, dejo caerlo en la vasija.
Mezclare en la vasija, tendré mi cena
De forma instantánea, gracias vasija.

IV
Castaña paloma de ojos café
¿Por qué me haces llorar?
Rubio cachorro de león
¿Por qué me clavas un puñal?
Yo no hice nada más que amar
Sin obtener recompensa alguna.

V

¡Arde colosal mi furia!
Por fin mi corazón esta muerto
Y puede descansar en paz.

VI

Mi madre me ama.
Mi padre me ama.
Mis hermanos me aman.
En cambio tú no me amas.
Es por eso que el cuchillo,
Alegre, acaricia mi brazo.

VII

Soy un bufón, digo la realidad
Y nadie me la cree.
Los matare a cada uno
Entre risas y convulsiones.
Solo los muertos pueden ver
La realidad tal cual yo la veo.

VIII

¡Exaltad mi cadáver, hijos míos!
¡Beban de mi pus, muerdan mis tripas!
Soy su Mesías delicioso
Listo para el rico asado
Hecho a la Cruz.



IX
No necesito de tuyo, cuyo amor.
Vivo eterno en mi soberbia
Y me alzo orgulloso de mi mismo.
Ya no duermo más con las culpas
De que jamás me hayas querido.

X

Oh, joven anciano mió
Que si haz de ser lanzado
A lo profundo de los infiernos
Pues salta entusiasmado
Y con una sonrisa grotesca
Tal cual cicatriz en tu cara.

XI

Hermosas mis manos
Que labran las letras
Y las prepara a cada una
Para el magno sacrificio
A un dios vano y celoso.
Mi hermano, segundogénito,
Cría y pasta a los discursos.

XII

Feroces las bestias rugen
El nombre del anónimo.
Finjo poder oírlas
A cada animal rabioso,
Bien peludos y dientudos
Pero con lenguas en los ojos.

XIII

Cada noche que pasó
Actuó su libertad.
Supuesta y fantasiosa.
Cada día que pasó
Ejecutó su esclavitud
Realista y cotidiana.

XIV

Sobre tu tumba bailo,
En tu panteón duermo.
Nuestra cripta con fandango.
Nos silenciamos eternos
Como amantes divorciados.

XV

No me convences
Ni con tus vuvuzelas
Ni con tus pancartas.
Adoro a mi cerebro
Y cuido de mi hígado.

XVI

Soy maquina de sangre
Picando nuestras carnes.
El kilo de pollo a 35,
El medio kilo de gente
Por toneladas en masas
Se vende bien.

XVII

Acaricie tus pechos jugosos
Como un buen lujurioso.
Pero me olvide el carnet
Para conducirlos
En casa.

XVIII

Empalagoso el cadáver exquisito
Que se hace siendo uno solo.
Que pena, que lastima.

XIX
Llegue justo con el cambio
Que tu padre me había pedido.
Pero no llegue con el vuelto
Que tu madre me había exigido.
Me lanzaste tu brava llama
Pero yo la había extinguido.
Hace mucho, mi corazón,
Que nos hemos perdido.

XX
Reí al escuchar tu llanto
Pero de todas maneras
Tuve que calentar el plato
De nuestra sopa mohosa
Hecha en tu pantano.

XXI

Soy tu Drama Queen
Exigiendo tragedias,
Ahí, en donde no están.
Poseo el poder absoluto
De llorar cuando hay risas.

XXII

¡Crepúsculo y Amanecer!
¿Qué esquizofrenia es esta?
¡Otoño a Primavera!
Nos invade la paranoia
De la astrología cierta
Solo en nuestros antepasados.

1 comentario:

  1. La verdad algunos me gustaron y otros son muy repetitivos en base a que tenes una fuerte obsecion con la muerte

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